Trayectoria
Anselmo Jaramillo Guajardo es lutier hace más de cincuenta años. Su formación ha sido mayormente autodidacta, aunque en la última década ha realizado pasantías de perfeccionamiento en Madrid, España. Sus primeros intentos de lutería se desarrollaron en su tiempo libre, en un pequeño taller dentro de su hogar de Coronel (región del Biobío). Luego de trasladarse a Santiago, se dedicó a tiempo completo a la construcción de instrumentos cordófonos.
En los años ‘80, es el cantor a lo poeta y académico Francisco Astorga Arredondo que inicia a Anselmo Jaramillo en la construcción del guitarrón chileno, cuando le encarga replicar un ejemplar. Desde entonces, ha confeccionado decenas de estos instrumentos, conservando las técnicas tradicionales y agregando algunas innovaciones que han favorecido la sonoridad y durabilidad del guitarrón chileno. Debido a ello, se le reconoce como uno de los lutieres más importantes de Chile.
A lo largo de su trayectoria, ha logrado excelentes resultados en los instrumentos tradicionales chilenos: guitarrón chileno, rabel y guitarra. Muchos de estos ejemplares han traspasado fronteras, siendo reconocidos por músicos y solicitados por museos de todo el mundo.
Las Maderas
Antiguamente, los guitarrones chilenos se confeccionaban con madera nativa: ciruelillo, laurel, alerce, raulí, lingue y canelo, entre otros. Sin embargo, actualmente no es posible trabajar con algunas de estas maderas debido a que son especies protegidas y/o son escasas en el mercado, como es el caso del alerce y el canelo.
En la actualidad, las maderas utilizadas por Anselmo Jaramillo son tanto nacionales como importadas, de acuerdo a las cualidades físicas, sonoras y estéticas que aportan al instrumento. Así, al momento de construir un guitarrón chileno, Anselmo Jaramillo selecciona las maderas de acuerdo a la proyección del sonido, encordado, tono y color que se requiera. Según estas características, selecciona las maderas específicas para cada parte del instrumento.
Algunas de las maderas que actualmente usa como materia prima para el guitarrón chileno son las siguientes:
- Ébano, caoba, jacarandá y raulí son utilizadas para aquellas partes que se someten a mayor fuerza y tensión, como el mango, pala, diapasón y puente. Además, algunas de estas maderas pueden utilizarse para construir clavijas.
- Ciruelillo, pino oregón, arce, abeto y cedro rojo son consideradas maderas de mayor flexibilidad y son utilizadas en partes como la tapa armónica y chapas decorativas.
Otros materiales y accesorios
Aunque la madera es la materia prima por excelencia en el guitarrón chileno, también son necesarios otros materiales y accesorios para asegurar su calidad. Entre ellos, se encuentra:
- el hueso para cejuelas (algunos lutieres utilizan piezas plásticas)
- la roseta para adornar la boca
- las clavijas, que pueden ser de madera o metálicas
- las cuerdas de nylon o metálicas, de acuerdo al estilo sonoro que se desee
- el barniz acrílico para madera
Planimetría e Innovaciones
En los treinta años dedicados a la construcción de guitarrones chilenos, Anselmo Jaramillo ha introducido algunas innovaciones e incorporado elementos de lutería de otros instrumentos. Algunas de estas mejoras son el ensamble cónico de las clavijas de madera, la instalación de un nervio a lo largo del mango y el uso de maderas importadas.
Cabe destacar que parte importante de este proyecto fue elaborar los planos a escala de 4 guitarrones chilenos, acción que según nuestro comprender, sería la primera vez que se realiza planimetría de este instrumento.
Uno de los planos a confeccionado corresponde a una creación propia de Anselmo Jaramillo que ha denominado "guitarrón de estudio", cuyo tamaño es menor y cuenta sólo con 19 cuerdas, con el propósito de facilitar el aprendizaje de la ejecución del instrumento. Los otros tres ejemplares fueron seleccionados por el lutier, debido a que los utiliza como matriz para los guitarrones chilenos que confecciona en la actualidad, siendo estos:
Modelo Needham
El ejemplar en poder del lutier Anselmo Jaramillo, contiene una etiqueta en el interior de la caja que reza ‘año 1996’. Sin embargo, según el lutier, su diseño y técnica de lutería aluden a una antigüedad de cien años al menos, destacando clavijas de madera, chapecaos (trastes movibles) y adornos de conchaperla (nácar) alrededor de la boca.
Modelo Saavedra
Propiedad del pircano Manuel Saavedra Orellana (otrora propiedad de su suegro, Juan de Dios Reyes). Cuenta con clavijas de madera, una pronunciada curvatura en la caja y múltiples adornos en la tapa.
Modelo Universidad de Chile
El ejemplar original está en poder del Instituto de Estudios Musicales de dicha casa de estudios. Éste es uno de los modelos que Anselmo Jaramillo utiliza con mayor frecuencia, debido a su cómodo tamaño de caja y curvas más sutiles.